En un contundente fallo, la justicia ha desestimado la querella presentada por Vox contra Begoña Gómez, esposa del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
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La jueza Coro Monreal ha concluido que no existen indicios sólidos de tráfico de influencias en la Universidad Complutense de Madrid (UCM), calificando las acusaciones de Vox como «meras sospechas y conjeturas».
La querella, que acusaba a Gómez de aprovechar su posición para influir en la adjudicación de un contrato de software valorado en 72.000 euros, ha sido archivada por falta de significación delictiva.
La jueza destacó que el expediente de contratación se desarrolló conforme a las normas que regulan la contratación del sector público.
Este fallo representa un varapalo significativo para Vox, que ha intentado sin éxito vincular a Gómez con prácticas corruptas. La jueza subrayó que no se encontró ninguna evidencia de que Gómez ejerciera influencia indebida sobre los funcionarios responsables del proceso de contratación.
La decisión judicial también pone de relieve la necesidad de transparencia y justicia en el ámbito político y educativo. Es fundamental que las acusaciones se basen en pruebas concretas y no en sospechas infundadas que solo buscan desacreditar a figuras públicas.
En un contexto donde la democracia y los derechos humanos son pilares fundamentales, este fallo reafirma la importancia de un sistema judicial independiente y justo. La justicia no debe ser utilizada como herramienta de persecución política, sino como garante de la verdad y la equidad.
¿Hasta cuándo permitiremos que se utilicen las instituciones judiciales para fines políticos?
FUENTES: El Plural : MSN Noticias : Europa Press