Bill Gates, el visionario ex directivo de Microsoft, ha invertido en empresas que producen alimentos sintéticos a base de CO2, agua y microbios. Estas innovaciones prometen un futuro más sostenible y libre de emisiones de gases de efecto invernadero.
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Revolución alimentaria con grasa sintética
Gates ha invertido en Savor y C16 Biosciences, dos startups estadounidenses que desarrollan alternativas a las grasas animales y vegetales. Según el blog de Gates, estas empresas buscan crear productos alimenticios sintéticos sin recurrir a la agricultura y ganadería tradicionales. Se estima que esas actividades económicas son responsables de aproximadamente el 25% de las emisiones globales de gases de efecto invernadero.
Savor, con sede en San José, California, utiliza un proceso termoquímico para fabricar grasa sintética. Este proceso implica tomar dióxido de carbono del aire e hidrógeno del agua, calentarlos y oxidarlos para producir ácidos grasos. Estos ácidos se combinan luego para formar grasa sintética, como la mantequilla, que es casi indistinguible de la original. Gates destaca que esta grasa:
Alternativas al aceite de palma
Por otro lado, C16 Biosciences, con sede en Nueva York, ha desarrollado Palmless, una alternativa al aceite de palma. Este aceite sintético se produce mediante la fermentación de un microbio de la levadura que emula las propiedades del aceite de palma. Palmless se lanzó comercialmente en noviembre de 2022 y ya se utiliza en productos como Save the F#$%ing Rainforest, un aceite nutritivo para la industria de la belleza.
El aceite de palma es omnipresente en productos alimenticios y cosméticos debido a su bajo costo y estabilidad. Sin embargo, su producción masiva provoca deforestación y emisiones significativas de gases de efecto invernadero. La alternativa de C16 Biosciences promete mitigar estos problemas al ofrecer un producto químicamente similar pero más sostenible.
Impacto y futuro de los alimentos sintéticos
Gates y las startups en las que ha invertido trabajan para reducir el costo de producción de estos alimentos sintéticos. Su objetivo es hacerlos accesibles al gran público y competitivos con las grasas animales y vegetales tradicionales. Además, estas innovaciones podrían transformar sectores como la belleza, el cuidado personal y la alimentación. Dichas iniciativas tienen el potencial de reducir significativamente la huella de carbono global.
Las inversiones de Bill Gates en alimentos sintéticos representan un avance significativo hacia un futuro más sostenible.