Sheila Ibañez 
Es urgente reforzar la protección contra cualquier forma de discriminación en el acceso a la vivienda. Archivo: El Solidario
Una joven mallorquina fue rechazada sin más explicaciones por estar empadronada en su ciudad. Los altos precios del alquiler no son la única barrera para acceder a una vivienda digna.
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Los alquileres en España alcanzan precios récord. Por primera vez en la historia sobrepasan la barrera de los mil euros mensuales de media, según los últimos datos de Fotocasa. Si embrago, no solo el precio es un problema, sino también los requisitos abusivos.
Prácticas discriminatorias en el alquiler
Una joven mallorquina fue rechazada de manera arbitraria por estar empadronada en su ciudad. Esta práctica es moralmente discutible y, en algunos casos, ilegal. Según la Ley 62/2003 este proceder es una forma de discriminación indirecta: “Cuando una disposición legal o reglamentaria, una cláusula convencional o contractual, un pacto individual o una decisión unilateral, aparentemente neutros, puedan ocasionar una desventaja particular a una persona respecto de otras por razón de origen racial o étnico, religión o convicciones, discapacidad, edad u orientación sexual».
Dificultades legales y morales
Aunque la discriminación es ilegal, los propietarios tienen libertad para elegir inquilinos. Esto deja un vacío legal que permite prácticas cuestionables.
Es urgente reforzar la protección contra la discriminación en el acceso a la vivienda. Nadie debería ser excluido de un alquiler por su origen o lugar de residencia.
Fuente: Infobae
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