
Imagen: publico.es. El Solidario. La frontera del Tarajal, a 3 de enero de 2025, en Ceuta (España).
Tras años de tensas negociaciones, España y Marruecos están a punto de reabrir las aduanas comerciales de Ceuta y Melilla, cerradas unilateralmente por Marruecos en 2018. Este paso busca normalizar el comercio y fortalecer las relaciones diplomáticas entre ambos países.
La reapertura de las aduanas tendrá un impacto directo en la población local. Se espera que el comercio formal sustituya al denominado «comercio atípico», proporcionando mayor seguridad y estabilidad económica a los trabajadores y comerciantes de la zona.
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Sin embargo, el acuerdo inicial limita el tránsito a un camión diario por cada puesto aduanero en ambos sentidos, lo que podría restringir el volumen de mercancías y afectar a pequeños comerciantes que dependían del flujo previo.
Una nueva ruta entre dos países
Las negociaciones políticas han sido complejas, con Marruecos mostrando reticencias por cuestiones de soberanía. El acuerdo alcanzado refleja concesiones mutuas: Marruecos permitirá la entrada de productos españoles como artículos de higiene, limpieza, electrodomésticos y electrónica, mientras que España aceptará productos marroquíes como frutas, legumbres y pescados.
No obstante, la limitación en el número de camiones y la falta de claridad sobre el paso de viajeros con bienes adquiridos en el otro lado de la frontera generan incertidumbre sobre la efectividad y alcance real de estas medidas.
Políticamente, la reapertura de las aduanas representa un avance en las relaciones hispano-marroquíes, tras años de tensiones diplomáticas. Sin embargo, las restricciones impuestas y la percepción de que España ha cedido a las condiciones de Marruecos han generado críticas internas.
Algunos sectores consideran que el acuerdo podría comprometer la soberanía española en las ciudades autónomas y no satisface plenamente las necesidades comerciales de la región.
¿Qué ocurre con Sáhara Occidental?
Tras numerosas negociaciones y la reapertura de las aduanas, España respalda la postura marroquí sobre la soberanía del Sahara. España reconoce la seriedad del asunto, la importancia y el esfuerzo realizado por Marruecos por encontrar una solución mutuamente aceptable.
Ceuta y Melilla
En cuanto a la respuesta del presidente de Melilla, Juan José Imbroda (PP), ya denunció problemas económicos por el cierre de la frontera en 2018 y rechazó la reapertura con distintas condiciones a las anteriormente existentes. No obstante, el presidente de Ceuta, Juan Jesús Vivas, mantiene la calma y es prudente ante las negociaciones acontecidas, además de referirse a este proceso como una «nueva etapa de transformación económica«
Ante la inminente reapertura de las aduanas de Ceuta y Melilla siendo un paso significativo hacia la normalización de las relaciones comerciales y diplomáticas entre España y Marruecos, las limitaciones acordadas y las preocupaciones sobre la soberanía y el impacto económico en la población local sugieren que aún quedan desafíos por resolver para lograr una integración fronteriza plena y beneficiosa para ambas partes.
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