Un accidente laboral en Massanassa deja un trabajador fallecido y otro gravemente herido, reavivando el debate sobre la seguridad en el trabajo y la responsabilidad del Gobierno valenciano. Familiares y compañeros apuntan a una cadena de negligencias.
El sonido de las ambulancias rompió la calma de la mañana en Massanassa, pero la tragedia ya había sucedido. Un trabajador de 51 años perdió la vida y otro resultó gravemente herido al quedar atrapados por una pérgola derrumbada parcialmente mientras realizaban labores de mantenimiento e inspección en un centro escolar dañado por la DANA. Este fatídico accidente, que podría haberse evitado según denuncian los sindicatos, vuelve a poner en el centro de la polémica la gestión del presidente Carlos Mazón en materia de prevención y seguridad laboral.
Quizás te interese: España acusada por el Consejo de Europa por prácticas judiciales cómplices de la violencia vicaria
Los primeros informes apuntan a que el centro escolar se encontraba en pésimas condiciones tras la DANA y carecía de la seguridad pertinente para trabajar en sus inmediaciones, lo cual ha levantado críticas entre los colectivos laborales y ha desatado una ola de indignación. “Esto no es un accidente, es una negligencia. Sabíamos que estas condiciones no eran seguras, y nadie hizo nada”, expresó entre lágrimas uno de los compañeros de la víctima. Mientras tanto, la familia del fallecido ha pedido justicia.
Comunidad educativa valenciana abandonada
Las cifras son inquietantes y es que, según datos oficiales, la Comunitat Valenciana ha registrado un aumento del 12% en accidentes laborales graves en el último año. Para muchos, esta muerte no es un caso aislado, sino el reflejo de un sistema que prioriza los costos sobre la vida humana. Numerosas personas claman alzando sus voces que se «podría haber evitado».
Tras la DANA, se han cerrado numerosos centros educativos, siendo sus instalaciones dañadas por el temporal y tomando cartas los equipos directivos de la falta de atención por parte del gobierno valenciano, sin aportar seguridad a los trabajadores que acuden a reparar los daños, y con la escasa pretensión de garantizar una vuelta a las aulas de forma fiable por parte del alumnado.
El Gobierno de Mazón enfrenta críticas feroces, pero las soluciones parecen lejanas. ¿Qué precio tiene una vida humana? y ¿Hasta cuándo permitiremos que la falta de prevención cobre más vidas?
La tragedia en Massanassa no es solo una pérdida irreparable; es una llamada de atención para todos. Hay que tomar acción antes de que sea demasiado tarde.
Síguenos en nuestras redes sociales: Instagram: @elsolidariorg / X: @X_ElSolidario y en nuestro canal de Whatsapp El Solidario