En la devastada Franja de Gaza, la activista palestina Soraida Hussein levanta la voz por la dignidad y los derechos humanos en medio de una crisis humanitaria sin precedentes. Como cofundadora del Women’s Affairs Technical Committee (WATC), Hussein trabaja intensamente para defender a su comunidad, enfocándose en los derechos de las mujeres y en la protección de los más vulnerables ante un panorama de violencia e injusticias diarias.
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La situación en Gaza es crítica: tras los recientes bombardeos, se estima que más de 42,000 personas han perdido la vida y que alrededor de 1.9 millones han sido desplazadas, sumiendo a la región en una desesperante escasez de alimentos, agua y medicamentos.
La falta de acceso a servicios básicos se agrava en un contexto donde cada día se vulneran los derechos de miles de palestinos, muchos de los cuales son menores de edad y detenidos en condiciones inhumanas.
Según el Centro Palestino para los Derechos Humanos, 6,500 palestinos fueron arrestados en 2018, incluidos 400 menores, quienes frecuentemente enfrentan condiciones de abuso y tortura.
A través de su trabajo, Hussein también destaca el rol de las redes sociales para concienciar y movilizar apoyo internacional. En plataformas como Twitter y Facebook, su mensaje llega a activistas y organizaciones globales, quienes abogan junto a ella por justicia para Gaza. Para Soraida, esta lucha es también una llamada urgente a la comunidad internacional para que imponga medidas efectivas, incluyendo embargos de armas a Israel, como han propuesto delegaciones europeas recientemente.
“La paz solo es posible si hay justicia para el pueblo palestino”, declara Soraida Hussein, insistiendo en que sin una intervención internacional decidida, los derechos humanos en Gaza continuarán siendo una aspiración lejana. La comunidad global debe escuchar esta llamada y actuar: sin derechos humanos no hay paz posible.