Un juez federal ha dictaminado que Google ha violado las leyes antimonopolio para mantener su dominio en las búsquedas de internet, una decisión que podría tener repercusiones significativas para la industria tecnológica y la equidad en el mercado digital.
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Esta sentencia histórica marca un hito en los esfuerzos por frenar el poder de las grandes empresas tecnológicas y proteger la competencia y la innovación.
Demanda por monopolio
El juez Amit Mehta, del Tribunal de Distrito de los Estados Unidos, concluyó que Google ha utilizado prácticas ilegales para consolidar su monopolio en el mercado de las búsquedas en internet.
Según el fallo, Google ha mantenido su posición dominante mediante acuerdos exclusivos y pagos multimillonarios a fabricantes de dispositivos y navegadores para que su motor de búsqueda sea el predeterminado.
Estas tácticas han impedido que competidores más pequeños puedan ganar terreno, sofocando la innovación y limitando las opciones para los consumidores.
¿Competencia desigual y desleal?
Google controla aproximadamente el 89.2% del mercado de servicios de búsqueda general, cifra que asciende al 94.9% en dispositivos móviles.
Este dominio abrumador ha permitido a la empresa influir en el acceso a la información y en la publicidad digital, generando preocupaciones sobre la equidad y la justicia en el mercado.
La sentencia subraya que las prácticas de Google no solo han perjudicado a sus competidores, sino que también han afectado negativamente a los consumidores al reducir la diversidad de opciones disponibles.
Competencia equitativa en el mercado digital
La decisión judicial ha sido celebrada por defensores de la justicia y la equidad, quienes ven en este fallo una oportunidad para restablecer la competencia en el mercado digital.
El fiscal general de los Estados Unidos, Merrick Garland, calificó la sentencia como “una victoria histórica para el pueblo estadounidense”, subrayando que ninguna empresa, por grande e influyente que sea, está por encima de la ley.
Por su parte, Google ha anunciado su intención de apelar el fallo, argumentando que su éxito se debe a la preferencia de los consumidores por su motor de búsqueda, considerado el mejor de la industria.
Sin embargo, la sentencia abre la puerta a posibles remedios que podrían incluir la separación de partes del negocio de Google, lo que cambiaría radicalmente el panorama de la publicidad en línea y las búsquedas en internet.
En un momento en que el poder de las grandes tecnológicas está bajo un escrutinio sin precedentes, esta decisión podría sentar un precedente importante para futuras acciones regulatorias.
FUENTES: AP News: Al Jazeera : PCMag