El «volonturismo» crece, pero ¿es solidaridad o una forma de perpetuar el sufrimiento de las comunidades más vulnerables?
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Un voluntariado que no ayuda
El «volonturismo», promovido por agencias de viajes y redes sociales, ha convertido la solidaridad en un producto. Estos viajes, que venden una experiencia «auténtica» con las comunidades del sur, son solo una fachada que en lugar de ayudar, perpetúan las desigualdades. Montse Santolino, portavoz de la Federación Catalana de ONGs, denuncia que este tipo de turismo no tiene nada que ver con el voluntariado responsable. «Es una perversión del concepto de solidaridad», asegura.
Los efectos del «volonturismo» en las comunidades son devastadores. Lejos de beneficiar a la población local, fomenta actitudes colonialistas y paternalistas. “Los niños ven pasar a personas blancas y ricas que sacan fotos y se van», advierte Santolino. Esto no solo refuerza estereotipos dañinos, sino que genera lazos emocionales frágiles, rompiendo cualquier posibilidad de ayuda real. Este tipo de interacción les deja una sensación de abandono, creando un ciclo de dependencia y explotación emocional.
Trata de menores disfrazada de ayuda en Nepal
Uno de los ejemplos más alarmantes de esta problemática ocurre en Nepal, donde el 85% de los niños en orfanatos tienen padres. Estos menores son separados de sus familias para alimentar el negocio del «volonturismo». «Están siendo explotados bajo la apariencia de recibir ayuda», denuncia Santolino, resaltando cómo estas prácticas destruyen la esencia del voluntariado. Lo que debería ser un acto de solidaridad se convierte en un lucrativo negocio que se aprovecha de la pobreza y vulnerabilidad de las personas.
Es urgente repensar el voluntariado y asumir una responsabilidad real. El cambio comienza al rechazar ofertas que lucran con el sufrimiento de los demás y apoyar iniciativas que promuevan un voluntariado ético, organizado y comprometido.
¿Qué opinas del «volonturismo»? Comparte tu experiencia y ayúdanos a visibilizar esta realidad oculta.
Fuente: La Sexta