El empeño de Europa en mantener la guerra de Ucrania favorece a las grandes empresas de fabricación de armas
Colotxa 
Europa mantiene la Guerra de Ucrania beneficiando a empresas armamentísticas // Pol Pareja / Lennart Hofman // El Diario // El Solidario
La industria armamentística europea alcanza una subida histórica en bolsa tras la Cumbre de Jefes de Estado del pasado 2 de marzo en Londres, impulsada por el aumento de los presupuestos de defensa en la UE.
La reunión de líderes europeos celebrada en Londres ha tenido un impacto inmediato en los mercados financieros. Tras reafirmar el apoyo militar a Ucrania y el compromiso de aumentar el gasto en defensa, las principales empresas del sector armamentístico registraron ese mismo lunes subidas récord en bolsa. Indra, Leonardo, Thales y Dassault Aviation, entre otras, experimentaron aumentos del 10% al 17%, con Rheinmetall y BAE Systems con incrementos aún más destacados. Este crecimiento refleja la enorme rentabilidad que la industria bélica está obteniendo desde el inicio de la invasión rusa en 2022.
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El sector ha tenido un auge exponencial: Indra ha subido un 155%, BAE Systems un 175%, y Leonardo y Rheinmetall más de un 500% y un 1100%, respectivamente. Este crecimiento ha sido respaldado por grandes fondos de inversión como BlackRock, que han elevado su calificación a las acciones europeas, debido a la estabilidad y expansión que el nuevo enfoque de seguridad de la UE garantiza al sector armamentístico.
Este giro militar responde a una transformación profunda de la política europea y del nuevo Orden Mundial que ya está tomando forma. La creciente desvinculación de EEUU en materia de seguridad ha “empujado” a la UE a un proceso de rearme sin precedentes, se justifica Ursula von der Layen. La presidenta de la Comisión Europea, propuso un presupuesto de 800.000 millones de euros “para aumentar significativa y rápidamente la inversión en defensa y capacidades militares (…) y así compensar la pérdida de apoyo de Estados Unidos.”
El discurso oficial justifica este incremento como una necesidad defensiva, pero en la práctica, refuerza el complejo militar-industrial, cuyos intereses dependen del mantenimiento de los conflictos. El aumento del gasto en defensa, en detrimento de los servicios públicos y el bienestar social, fortalece la brutal e imparable escalada del sistema capitalista. Es necesario y urgente invertir esta tendencia.
Desmilitarizar es el primer paso para un futuro más justo y humano
Debemos promover relaciones pacíficas y reducir, de forma progresiva, el gasto militar hasta su total eliminación. Solo de esta forma liberaremos recursos para fortalecer la educación, la sanidad y la protección de los Derechos Humanos. Este proceso es esencial para preservar la VIDA, proteger el planeta y garantizar una vida digna para todas las personas.
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