
El Solidario: Palestinos regresan a Gaza, luego del alto al fuego.
A pesar del reciente acuerdo de alto el fuego, el ejército israelí continúa el genocidio en Gaza, dejando un rastro de muerte y destrucción. Mientras cientos de miles de palestinos regresan a sus hogares en el norte de Gaza, las fuerzas israelíes prosiguen con sus bombardeos, matando a civiles inocentes y socavando cualquier esperanza de paz.
El reciente acuerdo de alto el fuego, anunciado con gran fanfarria, parecía ser un rayo de esperanza para los palestinos que han sufrido durante meses de conflicto. Sin embargo, la realidad en el terreno es muy diferente
Las fuerzas israelíes han intensificado sus ataques, matando a decenas de palestinos, incluidos niños y mujeres. Esta escalada de violencia no solo viola el espíritu del acuerdo, sino que también demuestra la falta de compromiso de Israel con una paz duradera.
Un exterminio impune que no para
La situación en Gaza es desesperante. Los palestinos que regresan a sus hogares encuentran destrucción y desolación. Las infraestructuras básicas, como hospitales y escuelas, han sido devastadas por los bombardeos.
La comunidad internacional, que inicialmente aplaudió el acuerdo de alto el fuego, debe ahora enfrentar la cruda realidad de que las promesas de paz han sido rotas.
Es urgente que la comunidad internacional tome medidas decisivas para detener esta violencia. Las sanciones y la presión diplomática deben ser utilizadas para obligar a Israel a cumplir con sus compromisos y respetar los derechos humanos de los palestinos. La impunidad con la que actúan las fuerzas israelíes debe ser confrontada y condenada enérgicamente.
La trágica situación en Gaza requiere una solución justa y duradera al conflicto israelí-palestino. La paz no puede ser alcanzada a través de la violencia y la opresión.
Es hora de que la comunidad internacional se una firmemente en defensa de los derechos humanos y la dignidad de los palestinos. Solo a través de un compromiso genuino con la justicia y la igualdad se podrá lograr una paz verdadera y duradera en la región, que detenga el extermino del pueblo palestino.