Cuba se encuentra en alerta ante la inminente llegada de la tormenta tropical Rafael, que avanza por el Mar Caribe y podría alcanzar la isla con fuerza de huracán. Según el Instituto Cubano de Meteorología (Insmet), se prevé que Rafael continúe fortaleciéndose antes de tocar tierra, afectando especialmente el oeste del país, incluida La Habana, la ciudad más poblada.
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Preparativos en marcha
Ante la amenaza del ciclón, las autoridades cubanas han activado medidas de emergencia. El presidente Miguel Díaz-Canel anunció que se están tomando acciones para “minimizar los daños” y proteger tanto a la población como a sus propiedades. Las clases y actividades laborales han sido suspendidas, y ya han comenzado las evacuaciones de personas en viviendas precarias o en áreas vulnerables a inundaciones.
En la provincia de Pinar del Río, una de las más castigadas históricamente por huracanes, la Defensa Civil informó que más de 21,000 personas se encuentran en riesgo, y 18,000 de ellas ya han sido trasladadas a zonas seguras.
Impacto en medio de una crisis
Rafael es la 18ª tormenta tropical de una temporada marcada por la intensificación de fenómenos climáticos debido al cambio climático. Su llegada, además, se da en un contexto de crisis económica en la isla, amenazando con agravar la situación del sistema eléctrico y dañar aún más la infraestructura agrícola y habitacional. La tormenta podría ser el peor ciclón en golpear La Habana desde 2022, coincidiendo con la importante Feria Internacional FIHAV 2024.
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