
Imagen: alternativaseconomicas.coop. El Solidario. El grupo TEB, Casa Cooperativa y Perviure diseñan un proyecto de covivienda que integre a colectivos vulnerables.
Un reciente estudio revela que el 45,5% de las personas con discapacidad intelectual en España desea vivir de forma independiente, pero se ve impedido por la escasez de viviendas accesibles y adaptadas, así como por la falta de recursos económicos y oportunidades laborales.
El informe, titulado ‘Construyendo hogares: el acceso a la vivienda de las personas con discapacidad intelectual’, elaborado por la Fundación PwC y la Fundación Álex Rivera, destaca que el 72% de este colectivo continúa residiendo con sus familias.
Te interesará leer: La compatibilidad laboral en la sanidad pública y privada en el ojo de las reformas del Ministerio
Esta situación se atribuye a factores culturales y, principalmente, a la ausencia de opciones y apoyos que faciliten una vida independiente en viviendas no institucionales, como pisos propios, compartidos o tutelados.
Derecho a una independencia digna
La falta de acceso a una vivienda adecuada tiene profundas repercusiones sociales y psicológicas para las personas con discapacidad intelectual.
La dependencia prolongada de la familia puede limitar su autonomía, afectar su autoestima y restringir su participación plena en la sociedad.
Además, la ausencia de un espacio propio dificulta el desarrollo de habilidades esenciales para la vida diaria y la integración laboral, perpetuando ciclos de exclusión y dependencia.
Barreras y apoyos
Entre las principales barreras para la independencia de este colectivo se encuentran la escasez de viviendas adaptadas y accesibles, la limitada oferta de recursos económicos y la falta de oportunidades laborales.
Estas dificultades se ven agravadas por la discriminación y los prejuicios sociales que aún persisten, obstaculizando el acceso igualitario a la vivienda y otros servicios básicos.
Para abordar esta problemática, el estudio propone una serie de medidas urgentes.
Entre ellas, se destaca la necesidad de incrementar la oferta de viviendas adaptadas y asequibles, tanto a través de iniciativas públicas como privadas.
Asimismo, se subraya la importancia de implementar políticas que promuevan la inclusión laboral de las personas con discapacidad intelectual, garantizando ingresos que les permitan costear una vivienda digna.
Lucha por una sociedad más justa y equitativa
Además, se recomienda establecer programas de apoyo personalizado que faciliten la transición hacia una vida independiente, proporcionando asistencia en actividades cotidianas y fomentando la autonomía personal.
La implementación de estas medidas requiere un compromiso conjunto de las instituciones públicas, el sector privado y la sociedad en general.
Solo a través de esfuerzos coordinados y una visión inclusiva se podrá garantizar que las personas con discapacidad intelectual ejerzan plenamente su derecho a una vivienda digna y a una vida autónoma, contribuyendo así a una sociedad más justa y equitativa.
Síguenos en nuestras redes sociales @elsolidariorg / X: @X_ElSolidario y en nuestro canal de Whatsapp El Solidario; Instragam: @elsolidariorg TikTok: @elsolidarionews; Facebook: @ElSolidario
MUY INTERESANTE