El machismo sigue matando. Ya son 38 mujeres las asesinadas en lo que va de 2024
Maria Sánchez Peña 
Los procuradores de las Cortes de Castilla y León guardan un minuto de silencio por el feminicidio en Arroyo de Cuéllar. Fuente: Infobae
El asesinato en Segovia eleva a 38 las mujeres víctimas de violencia machista en 2024. ¿Qué fallos en el sistema permiten que esto siga ocurriendo?
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El Ministerio de Igualdad ha confirmado la cifra: 38 mujeres asesinadas por sus parejas o exparejas en lo que va de 2024. La última víctima, una mujer de 47 años en Segovia, ha sido asesinada por su pareja, sumándose a esta aterradora lista. El caso pone de nuevo sobre la mesa la realidad que enfrentan miles de mujeres, quienes viven con miedo y bajo amenazas constantes. Cada nuevo asesinato recuerda que el sistema sigue fallando.
Un sistema que no protege
Este último caso refleja una verdad innegable: el sistema sigue sin proteger a las mujeres de manera efectiva. “Estamos hablando de vidas humanas, no de cifras”, declaró un portavoz del Ministerio de Igualdad. A pesar de las campañas de concienciación, los recursos públicos y los avances en legislación, las víctimas siguen cayendo. La pregunta es inevitable: ¿qué más hace falta para detener esta violencia?
La violencia machista sigue creciendo en cifras, con 38 víctimas confirmadas hasta octubre de este año. Las medidas de protección no están funcionando, y la ineficacia de los protocolos queda patente. El hogar, que debería ser un espacio de refugio y seguridad, se convierte para muchas mujeres en una trampa mortal. Las políticas actuales necesitan ser revisadas con urgencia.
Frenar la violencia o seguir sumando víctimas
Cada mujer asesinada es una vida que no se recupera. El aumento en las cifras es un grito de auxilio, y quienes aún están atrapadas en relaciones abusivas necesitan más apoyo. “El miedo y el silencio son sus mayores enemigos”, afirman desde organizaciones feministas. No basta con condenar los crímenes; hay que actuar antes de que ocurran.
Las denuncias no son suficientes si no van acompañadas de medidas reales que frenen la violencia en el origen. Las fuerzas de seguridad y los servicios sociales deben estar mejor coordinados para evitar que más mujeres engrosen esta trágica lista. ¿Cuántas más tienen que morir para que el sistema reaccione de verdad?
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Fuente: Infobae
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