Sheila Ibañez 
Miles de israelíes se reunieron en Jerusalén y otras ciudades de Israel para manifestarse contra el primer ministro, Benjamin Netanyahu.
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La protesta fue organizada por el movimiento antigubernamental Banderas Negras. Los manifestantes exigieron un acuerdo de paz con Hamas que garantice el retorno seguro de 120 rehenes retenidos en Gaza. También acusan a Netanyahu de poner en peligro la seguridad de Israel y demandan elecciones anticipadas.
Contexto de las protestas
Las protestas se desarrollaron en varias ciudades importantes, incluyendo Jerusalén y Tel Aviv. En Jerusalén, miles de personas marcharon hacia la residencia de Netanyahu en la calle Azza. Con mensajes como «Netanyahu pone en peligro la seguridad de Israel», los manifestantes exigieron un acuerdo inmediato con Hamas.
La movilización terminó con la detención de cuatro personas por parte de la policía, que declaró la protesta ilegal.
Demandas de los manifestantes
- Acuerdo con Hamas: Exigen un pacto para el retorno seguro de los rehenes retenidos en Gaza desde el ataque del 7 de octubre.
- Retorno de evacuados: Piden el regreso de miles de israelíes evacuados tanto del sur, cerca de la frontera con Gaza; como del norte, cerca de la frontera con Líbano.
- Elecciones anticipadas: Crece la demanda por nuevas elecciones, con un 57% de la población apoyando esta medida.
Reacciones oficiales
El ministro de Defensa, Yoav Gallant, anunció que están más cerca que nunca de un acuerdo con Hamas. El alto cargo afirmó que Hamas ha mostrado una postura más flexible en las negociaciones recientes.
Acuerdo en negociación
- Primera Fase: Incluye un alto el fuego completo y el intercambio de rehenes, prioritariamente mujeres, ancianos y niños a cambio de presos palestinos.
- Segunda Fase: Implica la negociación de un alto el fuego permanente, algo que Hamas considera indispensable.
Impacto y perspectivas
El éxito de estas negociaciones es crucial para la estabilidad regional. Las protestas reflejan un amplio descontento con la gestión de Netanyahu, especialmente en temas de seguridad y derechos humanos. Las demandas de un alto el fuego y el retorno de los rehenes son vistas como esenciales para cualquier avance significativo en la paz en la región.
La protesta masiva en Jerusalén es un claro indicador del descontento popular con el liderazgo de Netanyahu y una demanda urgente de soluciones al conflicto con Hamas. El futuro político de Israel podría depender en gran medida de cómo se manejen estas negociaciones y las respuestas a las demandas de sus ciudadanos.
*Con información de Infobae
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