Grave crisis humanitaria en Sudán

Diez mujeres han fallecido durante el parto. La razón: el cierre del Hospital Al Bashayer, el último centro médico operativo en el sur de Jartum, capital de Sudán.

Su cierre se debió a la ofensiva de las Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF), en el marco de la guerra que este grupo paramilitar mantiene contra el Ejército de Sudán desde abril de 2023.

Faruq solicita la apertura urgente de corredores humanitarios que permitan la entrega de suministros médicos esenciales.

Según fuentes locales, al menos cinco clínicas han sido saqueadas. La seguridad en la región es extremadamente inestable, ya que las RSF han llevado a cabo registros en viviendas y detenciones arbitrarias, algunas de ellas a punta de pistola.

Bombardeo de las RSF deja cuatro muertos y 30 heridos

En un nuevo ejemplo de las acciones de las RSF, un bombardeo en la localidad de Karari ha causado al menos cuatro muertos, dos de ellos niños, así como 30 heridos. El director general del Ministerio de Salud, Fath al Rahman Mohamed al Amon, ha detallado que entre estos heridos hay 18 niños de entre cuatro y doce años.

Mohamed al Amon ha condenado lo que ha denominado «ataques sistemáticos» contra la población civil, especialmente por bombardear en pleno mes sagrado del Ramadán, cuando el tránsito de personas en la ciudad es mayor.

El gobernador de Jartum, Ahmed Osman Hamza, ha visitado la zona afectada y ha trasladado sus condolencias a los familiares de las víctimas. En un comunicado denuncia que «cada vez que la milicia es derrotada en el campo de batalla, recurre a la venganza contra los ciudadanos», lo que agrava aún más la crisis humanitaria en el país.

La guerra se inició en abril de 2023 debido a las disputas sobre la integración del grupo paramilitar en las Fuerzas Armadas sudanesas, un conflicto que ha paralizado el proceso de transición política tras la caída en 2019 del régimen de Omar Hasán al Bashir.

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