La Agencia Española del Medicamento ha aprobado el uso de piel artificial para tratar a grandes quemados en el Hospital Virgen del Rocío, Sevilla.
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Innovación y Colaboración
Este avance, resultado de 15 años de investigación, es obra de cuatro entidades públicas. La Universidad de Granada (UGR) y el Hospital Virgen del Rocío lideraron el proyecto, junto con la Red Andaluza de Diseño y Traslación de Terapias Avanzadas y el Hospital Virgen de las Nieves. La investigación empezó en 2009 con el objetivo de utilizar la ingeniería tisular para construir tejido artificial capaz de curar quemaduras graves. Antonio Campos, catedrático de Histología de la UGR, destacó la importancia de “la conjunción de la investigación básica y clínica”. Purificación Gacto, jefa de la Unidad de Grandes Quemados, explicó que la retroalimentación entre investigadores ha sido clave.
Procedimiento y Beneficios
La piel artificial se fabrica con células sanas extraídas del paciente y un biomaterial biocompatible. Esta piel tiene dos capas: epidermis y dermis, lo que la diferencia de otras opciones en el mercado. Álvaro Trigo y Fran Fernández, pacientes que recibieron esta piel, relatan sus experiencias positivas. Fran, ingresado en 2017, comentó: “Esto es magia, decimos que es piel mágica”. Álvaro, quemado en un 63% de su cuerpo, agregó: “La piel artificial salva vidas”. Ambos jóvenes lograron recuperarse gracias a este innovador tratamiento.
El Hospital Virgen del Rocío ha realizado 18 trasplantes compasivos desde 2017. Ahora, con la aprobación de la Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios (AEMPS), se podrá aplicar directamente sin autorización caso a caso. Este avance reduce significativamente el riesgo de infecciones y favorece una cicatrización rápida.
Desafíos y Esperanza
El proceso de fabricación de la piel artificial tarda cuatro semanas y, al estar hecha con las células del paciente, no provoca rechazo. No obstante, hay desafíos. El equipo de Campos trabaja en introducir nanopartículas con factores de crecimiento para acelerar el proceso y antibióticos para evitar infecciones. Fran y Álvaro compartieron sus desafíos y éxitos en la rehabilitación física y mental, destacando la importancia de la persistencia y el apoyo del equipo médico. Fran comentó: “Dejé de comer y es importantísimo nutrir de proteínas a la piel artificial”.
Este logro es un testimonio del poder de la investigación pública y el compromiso con el bienestar humano. Gacto y Campos recalcaron el valor del dinero público y la importancia de usarlo con responsabilidad. La piel artificial representa un avance significativo en la medicina regenerativa y ofrece esperanza a quienes sufren quemaduras graves.
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