Violación de derechos: Nacho Cano acusado de contratar a inmigrantes irregulares para su Musical ‘Malinche’
Ebony Viola 
Nacho Cano. Archivo: FERNANDO VILLAR / EFE
Delitos contra los derechos de extranjeros y trabajadores
El Juzgado de Instrucción nº 19 de Madrid ha iniciado diligencias contra Nacho Cano y otras dos personas por la presunta comisión de delitos contra los derechos de los ciudadanos extranjeros y delitos contra los derechos de los trabajadores. Se le acusa de contratar presuntamente a inmigrantes en situación irregular para su musical ‘Malinche’. Según el auto, estas personas fueron traídas desde México para trabajar en el espectáculo sin los permisos legales correspondientes.
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Explota a trabajadores migrantes
En septiembre de 2022, se estrenó el musical ‘Malinche’ en Ifema, Madrid, una obra que narra el mestizaje entre México y España. Para este montaje, se contactó a 19 bailarines mexicanos, a quienes se les prometió regularizar su situación en España mediante permisos de estudiante. Sin embargo, según las investigaciones, estos trabajadores eran explotados con largas jornadas laborales y sin salarios adecuados. Además, trabajaban en un bar vinculado a la productora durante los fines de semana, todo bajo la apariencia de una beca que no les permitía trabajar legalmente.
Denuncias y pruebas contundentes
El 11 de enero de este año, una de las afectadas presentó una denuncia que desencadenó la investigación policial. A través del análisis de redes sociales y conversaciones de WhatsApp, los agentes confirmaron que los bailarines estaban trabajando en el país de forma irregular. El 27 de junio de 2024, la Policía realizó una inspección encontrando a 16 bailarines mexicanos en situación irregular. Las pruebas son claras: Nacho Cano y su equipo trajeron a estas personas bajo falsas promesas y en condiciones laborales precarias, contraviniendo las leyes de inmigración y laborales españolas.
Esta situación no solo refleja una violación flagrante de los derechos humanos, sino que también pone de manifiesto la explotación laboral y la vulnerabilidad de los trabajadores migrantes. La justicia debe actuar con firmeza para sancionar a quienes se aprovechan de estas situaciones, asegurando que casos como el de Nacho Cano no queden impunes.
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