Rudy Ruyman, el ‘influencer’ que incita al odio, fue denunciado ante la Fiscalía por sus ataques contra personas migrantes
Fausto 
Ilustración: El Solidario. La acusación sostiene que Rudy Ruyman usa sus redes para difundir mensajes cargados de xenofobia y desprecio hacia las personas migrantes.
El conocido influencer Rudy Ruyman, con más de 140 mil seguidores en redes sociales, ha sido denunciado ante la Fiscalía de Canarias por un presunto delito de odio.
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La acusación sostiene que el creador de contenido ha utilizado su plataforma para difundir mensajes cargados de xenofobia y desprecio hacia las personas migrantes, lo que ha generado indignación en diversos sectores de la sociedad civil y activistas por los derechos humanos.
La denuncia ha sido presentada por la asociación Canarias Libre de CIEs, que considera que los mensajes de Rudy Ruyman incitan a la discriminación y contribuyen a un clima social de intolerancia.
En sus publicaciones, el influencer ha llegado a utilizar términos despectivos para referirse a los migrantes, además de promover estereotipos que asocian la inmigración con el aumento de la delincuencia y otros problemas sociales.
«Este tipo de discursos refuerzan el racismo y el rechazo hacia personas que ya de por sí viven en situaciones de gran vulnerabilidad», denuncian desde la organización, que reclama una actuación firme de las instituciones para frenar la propagación de mensajes de odio en redes sociales.
Delito: «discurso de odio»
La legislación española establece severas sanciones para los delitos de odio, que incluyen la incitación a la violencia o el discurso de odio contra grupos vulnerables, como es el caso de las personas migrantes.
Estos delitos pueden conllevar desde multas hasta penas de prisión. La Fiscalía tendrá ahora que investigar si las publicaciones de Rudy Ruyman encajan en este tipo de delitos.
El auge del discurso xenófobo en las redes sociales no es un fenómeno nuevo, pero la gran visibilidad de figuras como Rudy Ruyman, quien cuenta con un amplio alcance en plataformas como Instagram y TikTok, ha generado preocupación entre colectivos de defensa de los derechos humanos.
La libertad de expresión, recuerdan los expertos, no puede amparar discursos que fomenten el odio hacia colectivos vulnerables.
La sociedad civil ha comenzado a organizarse en respuesta a estos discursos. En redes sociales, han surgido campañas que exigen responsabilidad a los influencers en el manejo de su discurso, especialmente cuando pueden influir en la percepción de temas tan sensibles como la inmigración.
Fuentes: eldiario.es :
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