La noticia de que Rachele Mussolini, nieta del dictador italiano Benito Mussolini, ha dejado el partido Hermanos de Italia (FdI), liderado por la primera ministra Giorgia Meloni, ha causado conmoción en el panorama político italiano.
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Mussolini, quien en las últimas elecciones municipales de Roma obtuvo la mayor cantidad de votos, ha sido una figura prominente dentro de FdI. Sin embargo, su descontento con la dirección actual del partido refleja una creciente preocupación sobre la radicalización de la política italiana. La discrepancia con la postura del partido sobre los derechos de las minorías parece haber sido el catalizador principal para su salida.
«Es hora de pasar página e ingresar a un partido que sienta más cercano a mis sensibilidades moderadas y centristas», afirmó Mussolini a la agencia de noticias Ansa, confirmando reportajes anteriores.
El partido Hermanos de Italia tiene sus raíces en el Movimiento Social Italiano (MSI), heredero del fascismo de Benito Mussolini, fundado tras la Segunda Guerra Mundial. Desde que asumió el cargo en 2022, Meloni ha intentado presentar al partido como una formación conservadora tradicional. No obstante, los críticos argumentan que esta imagen es solo una fachada, señalando las duras posiciones del partido sobre inmigración, aborto y derechos de las parejas del mismo sexo.
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Fuente: uol.com.br