En un contexto de creciente tensión política, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, ha denunciado un presunto golpe de Estado en su contra, promovido por sectores de la oposición y algunos partidos de derecha.
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Esta grave acusación ha generado un intenso debate en el país, poniendo en el centro de la discusión temas cruciales como polarización, la manipulación de la información, el papel de los medios de comunicación y la imparcialidad de la justicia.
Acosos mediático, político y judicial
A través de su cuenta en X (anteriormente Twitter), Petro manifestó que se está gestando un golpe de Estado en su contra, impulsado por la investigación del Consejo Nacional Electoral (CNE) y la Comisión de Acusaciones de la Cámara de Representantes sobre una posible violación de los topes electorales durante su campaña presidencial de 2022.
El presidente comparó esta situación con la que vivió en 2013, cuando fue destituido de la Alcaldía de Bogotá por el entonces procurador general Alejandro Ordóñez.
Petro ha llamado a la ciudadanía a movilizarse en defensa de su mandato, recordando cómo en el pasado el pueblo bogotano fue determinante para su reinstauración en la alcaldía.
“Esta vez le toca al pueblo colombiano y ya no es llenar la plaza de Bolívar, sino ir por el poder”, afirmó el mandatario.
La denuncia de Petro se produce en un momento de alta polarización política en Colombia. Según el presidente, el CNE está actuando fuera de sus competencias al investigar su campaña, ya que la Constitución otorga inmunidad al presidente y solo la Comisión de Acusaciones tiene la autoridad para investigarlo penal y disciplinariamente.
Petro ha señalado que esta situación es un intento de la derecha para despojarlo de su fuero constitucional y sacarlo del poder.
En medio de estas acusaciones, Petro subrayó la importancia de defender los derechos humanos y ha denunciado que detrás de estos ataques hay intereses de grupos poderosos que buscan desestabilizar su gobierno.
Además, el mandatario colombiano ha advertido sobre un presunto plan para acabar con su vida, promovido por un supuesto grupo de la mafia.
La situación en Colombia es delicada y requiere una respuesta firme y pacífica. La denuncia de Gustavo Petro sobre un golpe de Estado en curso es un llamado a la reflexión y a la acción en defensa de la democracia, los derechos humanos, y la sostenibilidad.
En estos momentos críticos, es esencial que la ciudadanía se mantenga informada y participe activamente en la defensa de los valores fundamentales que sustentan la sociedad colombiana.
FUENTE: Infobae: La Opinión: Visión Tunera