Jesús Aguirre, presidente del Parlamento andaluz, ha propuesto un aumento en las dietas de los diputados. Argumenta que los 3.343 euros mensuales que reciben no son suficientes. Esta cantidad triplica el salario mínimo en España, lo que ha generado críticas.
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Aguirre, ex médico y consejero de Sanidad, defiende la necesidad de elevar las dietas para que los diputados puedan «llegar a fin de mes». Aunque las dietas no se han incrementado en siete años, la propuesta ha generado controversia debido a las ya elevadas retribuciones que reciben los parlamentarios.
Detalles de las retribuciones actuales
Los diputados andaluces perciben 3.343 euros al mes sin dietas. Además, reciben bonificaciones adicionales: 1.537,37 euros para el presidente, 1.234,28 para el vicepresidente y portavoces de grupo; 928,08 para secretarios de mesa y portavoces adjuntos; y 648,23 euros para secretarios de grupo.
Aparte de los salarios y dietas, los diputados reciben indemnizaciones por gastos de viaje y alojamiento. Estas cantidades varían según la distancia de su residencia a Sevilla, oscilando entre 200 y 500 euros semanales.
La trayectoria de Jesús Aguirre
Jesús Aguirre, nacido en Córdoba en 1955, es licenciado en Medicina y especialista en Medicina de Familia. Ha ocupado varios cargos en el ámbito sanitario. Entre los más destacados se encuentra la presidencia del Colegio Oficial de Médicos de Córdoba y la Consejería de Sanidad de Andalucía durante la pandemia del Covid-19.
La propuesta de Aguirre ha suscitado críticas tanto de la ciudadanía como de sectores políticos. Muchos consideran que los salarios actuales son más que suficientes; y que la propuesta es insensible ante la realidad económica de muchos andaluces.
La necesidad de transparencia y equidad en el Parlamento andaluz
Es crucial que las decisiones sobre las retribuciones de los diputados sean transparentes y equitativas. Los representantes deben ser conscientes de la realidad socioeconómica de sus electores y actuar en consecuencia. Incrementar sus dietas mientras muchos ciudadanos luchan por llegar a fin de mes puede percibirse como una desconexión con las necesidades reales de la población.
Fuente: El Plural