La crisis migratoria en Canarias ha alcanzado niveles alarmantes, con un incremento del 126% en las llegadas de inmigrantes en situación irregular respecto al año pasado.
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Entre el 1 de enero y el 15 de agosto de 2024, han llegado a las islas 22.304 migrantes, frente a los 9.864 del mismo periodo en 2023. Esta situación ha puesto a Canarias en el epicentro de una crisis humanitaria que requiere soluciones urgentes y coordinadas.
El flujo migratorio hacia Canarias ha aumentado de manera exponencial, con cifras que triplican las del año anterior. Solo el 22 de agosto, 338 migrantes llegaron a las islas en tres cayucos, con al menos 12 menores entre ellos.
Este incremento ha llevado a una saturación de los centros de acogida y ha puesto a prueba la capacidad de respuesta de las autoridades locales y nacionales.
Medidas urgentes y modificación de la Ley de Extranjería
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se ha reunido con el líder autonómico de Canarias, Fernando Clavijo, para abordar la crisis y trazar líneas de actuación inmediatas.
El Gobierno ha asignado 50 millones de euros para apoyar a Canarias en la gestión de los menores migrantes no acompañados y ha instado al Partido Popular a respaldar la modificación de la Ley de Extranjería para permitir una distribución más equitativa de los migrantes entre todas las comunidades autónomas.
El papel de las ONGs y la Comunidad Internacional
Las organizaciones no gubernamentales han desempeñado un papel crucial en la gestión de esta crisis, proporcionando asistencia humanitaria y apoyo a los migrantes.
Sin embargo, la magnitud del problema requiere una acción más coordinada y el apoyo de la comunidad internacional. Diversas organizaciones defensoras de los derechos humanos han instado a los gobiernos a adoptar medidas que garanticen la justicia social y el respeto a los derechos de los migrantes.
Es fundamental que la ciudadanía y los líderes políticos se unan para exigir transparencia, responsabilidad y equidad en la gestión de la crisis migratoria. La justicia social y el respeto a los derechos humanos deben ser los pilares de cualquier solución.
FUENTES: El Plural : El Día : Onda Cero : La Sexta