La situación en Gaza ha alcanzado niveles de devastación sin precedentes, con miles de personas desplazadas y enfrentando una inminente hambruna. En los últimos días, más de 84 mil personas han sido forzadas a abandonar sus hogares debido a una nueva escalada de bombardeos israelíes, según informes de la ONU.
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La Agencia de Ayuda de la ONU para Refugiados Palestinos (UNRWA) ha descrito la situación como “apocalíptica”, con la mayoría de las personas perdiendo sus hogares total o parcialmente. Louise Wateridge, oficial superior de comunicaciones de UNRWA, señaló que muchas personas han huido con muy pocas pertenencias, llevando solo lo que pueden cargar en sus manos.
Desplazamiento masivo y crisis humanitaria
Los intensos combates en el norte de Gaza han obligado a decenas de miles de personas a huir del distrito oriental de Shujaiya. La violencia ha cortado el acceso a centros clave de distribución de ayuda, exacerbando la crisis humanitaria. La gente en Gaza está enfrentando una inminente hambruna, con informes de personas comiendo hojas de árboles o sobreviviendo solo con harina.
Las mujeres embarazadas, las personas con discapacidad y los niños no acompañados se encuentran entre los más vulnerables. La violencia ha impedido a la UNRWA acceder a su centro de distribución en el barrio de Tuffah, debido a su proximidad a la línea del frente.
Ayuda humanitaria bajo presión en Gaza
De las aproximadamente 84 mil personas desplazadas, unas 10 mil 600 han encontrado refugio en 27 lugares, incluyendo escuelas de la UNRWA, que están bajo una presión creciente para satisfacer la demanda. Otros desplazados se alojan en escuelas gubernamentales, edificios y zonas abiertas.
Para ayudar a los desplazados, la UNRWA ha distribuido agua, paquetes de alimentos y harina. También está prevista la distribución de pañales, colchones y lonas impermeables. Sin embargo, la continua obstaculización de la ayuda humanitaria por parte de las fuerzas israelíes agrava la situación.
Un llamado a la comunidad internacional
La ONU ha hecho un llamado urgente a la comunidad internacional para que intervenga y proporcione asistencia humanitaria inmediata. La situación en Gaza no solo es una crisis humanitaria, sino también una violación flagrante de los derechos humanos. Es imperativo que se tomen medidas para proteger a los civiles y garantizar el acceso a la ayuda humanitaria.
La comunidad internacional debe actuar con rapidez y decisión para poner fin a la violencia y proporcionar el apoyo necesario a los desplazados. La situación en Gaza es un recordatorio doloroso de la necesidad de una solución pacífica y duradera al conflicto israelí-palestino.