
EFE/El Solidario. Guerra en Gaza y Palestina.
Mientras la comunidad internacional observa con horror el avance de la ocupación israelí en Palestina, empresas como CAF y Sidenor continúan haciendo negocios con un régimen señalado por organizaciones de derechos humanos como Amnistía Internacional o Human Rights Watch por crímenes de guerra.
La colaboración de estas compañías no es accidental ni marginal: es estructural y está integrada en un sistema que sostiene la maquinaria del apartheid y la violencia sistemática contra el pueblo palestino.
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CAF, empresa vasca del sector ferroviario, participa en la construcción y operación del tranvía de Jerusalén, una infraestructura que conecta asentamientos ilegales israelíes en territorio ocupado.
Esta red de transporte no es inocua: legitima la colonización, la hace funcional y la presenta como parte de una normalidad que no existe. CAF no solo promueve la ocupación, sino que blanquea sus consecuencias ante la comunidad internacional.
Por su parte, Sidenor, dedicada a la producción de aceros especiales, aparece vinculada a la cadena de suministro de componentes utilizados por la industria militar israelí.
Aunque la empresa no fabrique armas directamente, su responsabilidad no desaparece al cerrar los ojos ante el uso final de sus productos. El silencio cómplice también mata.
Todo esto se enmarca en una arquitectura más amplia: bancos como BBVA y Santander financian a empresas que fabrican armas y sistemas de vigilancia utilizados en Gaza y Cisjordania. El dinero europeo fluye, mientras las bombas caen.
No se trata solo de ética empresarial, sino de cómplices de un genocidio en tiempo real. Las instituciones públicas españolas, empezando por el Gobierno y las comunidades autónomas que contratan con estas empresas, deben romper de inmediato todos los lazos con quienes lucran con la ocupación.
La impunidad empresarial no puede seguir blindada por el mercado. Es hora de exigir transparencia, responsabilidad y, sobre todo, justicia. Porque los derechos humanos no se negocian, se defiende.
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