En un movimiento que ha generado controversia, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha decidido nombrar a José Luis Escrivá como nuevo gobernador del Banco de España.
Esta decisión se produce tras la negativa del Partido Popular (PP) a pactar la renovación de los organismos económicos, lo que ha desatado críticas por parte de la oposición sobre la independencia y la transparencia en la gestión de estas instituciones.
El nombramiento de Escrivá, actual ministro de Transformación Digital y Función Pública ha sido visto por la derecha y la extrema derecha como una maniobra política que podría comprometer la independencia del Banco de España.
Como era de esperarse, el PP ha rechazado rotundamente esta designación, argumentando que «no se puede ser ministro por la mañana y gobernador por la tarde».
Esta postura ha llevado a un bloqueo en las negociaciones para la renovación de otros cargos clave en los organismos económicos. La falta de acuerdo entre el Gobierno y el PP ha puesto en evidencia la polarización política que afecta a España.
Mientras Sánchez defiende la idoneidad de Escrivá para el cargo, destacando su amplia experiencia en el sector financiero y su conocimiento en política monetaria, el PP insiste en que este nombramiento es un intento de “colonizar” las instituciones del Estado.
Escrivá asumirá su nuevo cargo en la reunión del consejo de gobierno del Banco Central Europeo (BCE), los días 11 y 12 de septiembre. En este cónclave se aprobará un nuevo recorte en los tipos de interés, luego de superar la crisis inflacionaria generada por la invasión de Rusia a Ucrania.
En su amplio currículum, José Luis Escrivá se ha desempeñado en diferentes cargos en el mismo Banco de España, en el BCE, en el BBVA y en el Banco Internacional de Pagos, lo que le asigna facultades para su nuevo cargo.
Cabe destacar que el extremeño presidió la Autoridad Fiscal (AIReF) desde su creación (aprobada por el PP) hasta 2020, cuando fue nombrado ministro.
FUENTES: El País : El Confidencial : Vozpópuli : Onda Cero : Gaceta