Las siete empresas sancionadas deberán cancelar una multa de 3.7 millones por repartirse contratos para hospitales, residencias y centros penitenciarios.
La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha impuesto una multa récord de 31 millones de euros a siete empresas del sector alimentario.
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Estas compañías, que operaban en el ámbito de hospitales y centros penitenciarios, fueron encontradas culpables de repartirse contratos de manera ilegal, vulnerando la competencia y perjudicando a los consumidores y al erario.
Prácticas ilegales, corruptas y colusorias
La investigación reveló que los directivos de estas empresas habían confabulado para manipular los procesos de licitación y adjudicación de contratos.
Mediante prácticas colusorias, limitaron la competencia y aseguraron beneficios desmedidos a expensas de la calidad y el precio de los alimentos suministrados en instituciones públicas.
Además de la multa millonaria, los responsables de estas compañías deberán pagar una suma adicional de 176.100 euros, conforme al artículo 63.2 de la ley de defensa de la competencia.
Esta sanción ejemplar envía un mensaje claro: la CNMC no tolerará prácticas anticompetitivas que afecten a los ciudadanos y al bienestar social.
Es imperativo que las empresas actúen con ética y transparencia, especialmente cuando se trata de servicios esenciales como la alimentación en entornos hospitalarios y penitenciarios. La sociedad exige responsabilidad y justicia, y esta multa es un paso crucial en esa dirección