La sanidad en Madrid está al límite. Enfermeras agotadas y sin refuerzos

La grave falta de enfermeras en Madrid, con solo 0,51 por cada mil habitantes, pone en riesgo la calidad asistencial y deja los centros sanitarios al borde del colapso.

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Déficit crítico en enfermería

La Comunidad de Madrid enfrenta una crisis severa en su sistema de salud, debido a un alarmante déficit de enfermeras. Según el último informe del SNS, la región cuenta con solo 0,51 enfermeras por cada mil habitantes, lo que la sitúa entre las peores del país. Esta escasez implica que cada enfermera debe atender a un número excesivo de pacientes, lo que compromete gravemente la calidad del servicio y, por ende, la salud pública.

Por otra parte, el sindicato SATSE ha sido enfático en sus denuncias, destacando que “hay centros que han dejado vacantes más del 70% de sus puestos”. Esta falta de personal no solo agota a las enfermeras, sino que también obliga a suspender sus permisos y libranzas. Además, el verano agrava la situación en las zonas turísticas, donde la demanda asistencial se dispara significativamente.

Condiciones laborales e inversión insuficiente

En cuanto a las condiciones laborales, María José Lomas, enfermera de urgencias y delegada de SATSE, señala que las malas condiciones salariales y laborales son las principales responsables de la fuga de profesionales de hospitales como el Universitario de El Escorial. “No estamos dando una calidad en la asistencia a las personas”, lamenta Lomas. Este hospital, que atiende a 12 municipios y 37 residencias, es un claro ejemplo de cómo la falta de inversión en sanidad pública afecta negativamente a la población.

Sanidad en Madrid, falta personal de enfermería — Archivo: El Solidario

Además, es importante destacar que el Gobierno de la Comunidad de Madrid destina solo el 4,4% del PIB a la sanidad, lo que representa uno de los porcentajes más bajos de España. Esta inversión insuficiente se traduce en apenas 1.538 euros por habitante, una cifra muy por debajo de la de otras comunidades como el País Vasco o Asturias. Como resultado, la falta de recursos impacta directamente en la contratación de personal, lo que a su vez afecta la calidad del servicio sanitario en la región.

Por lo tanto, es urgente que la Comunidad de Madrid tome medidas concretas para mejorar la situación del personal sanitario. Los ciudadanos merecen un sistema de salud robusto y bien dotado. Como bien señala SATSE, «las malas condiciones laborales no sirven como imán para atraer profesionales«. Es hora de priorizar la salud pública y ofrecer mejores condiciones para quienes nos cuidan día a día.

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