En un preocupante giro hacia la xenofobia, los partidos de derecha en España han intensificado su retórica antiinmigrante en un intento por ganar terreno en la competición electoral.
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Esta estrategia, que busca vincular la inmigración con la delincuencia y otros problemas sociales, no solo es peligrosa, sino que también socava los principios fundamentales de derechos humanos y justicia social.
Manipulación, bulos y desinformación
El reciente asesinato de un niño en Mocejón, Toledo, ha sido utilizado por figuras de la derecha para avivar el odio y la desconfianza hacia los migrantes.
A pesar de que el único detenido por el crimen es un joven español, la difusión de fake news y medias verdades ha llevado a una ola de mensajes xenófobos en redes sociales.
El eurodiputado Alvise Pérez, líder del partido “Se acabó la fiesta”, fue uno de los primeros en señalar falsamente a la comunidad migrante, utilizando una captura de Google Maps que mostraba una mezquita cercana al lugar del crimen.
El Partido Popular (PP) y Vox han sido particularmente activos en esta campaña de desinformación. Alberto Núñez Feijóo, líder del PP, ha reiterado en múltiples ocasiones la necesidad de controlar la inmigración ilegal, vinculándola con la ocupación de viviendas y otros problemas sociales.
Este tipo de retórica no solo es engañosa, sino que también fomenta un clima de odio y división que puede tener consecuencias devastadoras para la cohesión social.
Es imperativo que todos los sectores de la sociedad se unan para combatir la xenofobia y promover un discurso basado en la justicia social y el respeto a los derechos humanos.
¡Es hora de actuar! Exijamos transparencia, responsabilidad y equidad en la política y en la sociedad. Solo así podremos construir un futuro donde todos, independientemente de su origen, puedan vivir en paz y dignidad.
FUENTES : eldiario.es : El País