Develan el millonario sueldo de Gan Pampols, el exmilitar que Mazón ha nominado como vicepresidente valenciano
Silvia María Vicente Moya 
Imagen: elplural.com. El Solidario. Gan Pampols, exmilitar fichado por Mazón.
El fichaje de Gan Pampols, un exmilitar de alto rango, como vicepresidente de la Generalitat Valenciana por Carlos Mazón ha desatado una tormenta política y social. Ahora, la cifra de su sueldo pone en tela de juicio las prioridades del nuevo gobierno.
¿Qué significa para los ciudadanos que un militar retirado, sin experiencia previa en política autonómica, reciba un sueldo superior a los 100.000 euros anuales mientras miles de familias luchan por llegar a fin de mes? El reciente nombramiento de Gan Pampols como vicepresidente y la revelación de su remuneración han encendido las alarmas. Para muchos, esto refleja no solo un cuestionable uso de los recursos públicos, sino un símbolo de desconexión entre la clase política y los problemas reales de la población.
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El sueldo de Pampols, que asciende a una cifra considerablemente mayor que la de muchos altos cargos de otras autonomías, se suma a las críticas por la falta de transparencia en su nombramiento. Desde sectores sociales y opositores, se cuestiona si su experiencia en el ámbito militar es relevante para gestionar las complejas áreas que ahora supervisa. Además, se señala que mientras este tipo de fichajes gozan de jugosas remuneraciones, sectores clave como la sanidad, la educación o la vivienda sufren recortes o carecen de financiación suficiente.
El propio Mazón ha defendido su decisión calificándola de «necesaria para garantizar la seguridad y estrategia autonómica», pero, para muchos, estas palabras no justifican lo que perciben como un despilfarro público.
En un contexto de creciente desigualdad y desconfianza hacia las instituciones, este sueldo no solo indigna, sino que plantea la siguiente cuestión: los altos sueldos de los cargos políticos son una afrenta para millones de ciudadanos que luchan por subsistir. Mientras se recortan recursos esenciales como educación y sanidad, ellos disfrutan privilegios desmedidos. ¿Hasta cuándo se permitirá esta desconexión entre quienes gobiernan y las necesidades reales del pueblo? Es hora de rendir cuentas.
¿Es Gan Pampols el hombre que necesita la Comunidad Valenciana o un símbolo del desconcierto político?
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