Casi la mitad de los españoles no sabe reconocer una depresión y un 40% no sabe cómo pedir ayuda, ¿hasta cuándo seguiremos callados?
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La salud mental sigue siendo un gran desconocido en España. Casi un 20% de la población ha sufrido problemas de salud mental en el último año, pero pocos saben cómo actuar. Según una encuesta realizada por Pfizer, un 47,6% de los españoles tendría dudas sobre si está viviendo una depresión. Peor aún, un 38,8% no sabría ni cómo ni dónde pedir ayuda. Vergüenza, miedo al rechazo y falta de conocimiento son los principales obstáculos que mantienen a millones en silencio.
El estigma paraliza la búsqueda de ayuda
A pesar de los esfuerzos por concienciar, el miedo a ser juzgados o el desconocimiento siguen presentes. Más del 64% de los encuestados no sabe distinguir una depresión de un estado de ánimo pasajero. Se enfocan en síntomas obvios como la tristeza, pero ignoran señales como el cansancio o la falta de concentración. El problema es más grave de lo que parece: “El miedo y la vergüenza impiden a miles de personas buscar ayuda”, alerta el estudio.
A esto se suma el desconocimiento general. Mientras un 62% de los españoles querría ayudar a alguien de su entorno, muchos no saben cómo hacerlo. La falta de empatía y recursos, junto al temor a entrometerse, crea un círculo vicioso que solo profundiza el problema. “Un 57% de los encuestados reconoce que no tiene las herramientas para ofrecer apoyo”, destaca Pfizer.
Las redes sociales, un arma de doble filo
A pesar del miedo, el 80% de los encuestados afirma que acudiría a un profesional para buscar ayuda, aunque las redes sociales también juegan un papel. Un 70% de los jóvenes entre 25 y 34 años cree que plataformas como YouTube o Instagram son fundamentales para visibilizar la salud mental. Sin embargo, confiar exclusivamente en estos espacios puede ser arriesgado, ya que la información puede ser limitada o poco fiable.
La encuesta también revela algo alarmante: el 9,5% de los jóvenes de 18 a 24 años minimizaría el problema. Esto subraya la urgencia de generar conciencia y educar a la sociedad para que la salud mental sea entendida, respetada y atendida con seriedad. No podemos permitir que el miedo y la ignorancia sigan ganando la partida.
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Fuente: Infobae