La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha quedado bajo escrutinio tras revelarse que ha destinado 1,7 millones de euros en publicidad institucional a medios afines, particularmente al locutor Federico Jiménez Losantos, en los últimos cuatro años.Este dato ha generado una intensa polémica y un debate sobre la transparencia y el uso de los fondos públicos.
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Millonarios contratos por publicidad
Según un informe del portal El Salto, desde el inicio de su mandato, Ayuso ha favorecido a medios específicos con cuantiosas sumas de dinero en concepto de publicidad institucional.
La cifra, que asciende a 1,7 millones de euros, ha sido canalizada a través de contratos directos y subvenciones a plataformas mediáticas que han mostrado un claro sesgo a favor de su administración.
El director de comunicación de la Comunidad de Madrid, Carlos Rubio, defendió estos gastos afirmando que «la publicidad institucional es necesaria para informar a los ciudadanos sobre las actividades y servicios del gobierno».
Sin embargo, críticos argumentan que esta práctica se ha utilizado para promover una agenda política y favorecer a medios que sostienen una línea editorial alineada con Ayuso.
Gastos millonarios en publicidad
Las implicaciones de este gasto son significativas, especialmente en un contexto de crisis económica y recortes en servicios públicos esenciales como la sanidad y la educación.
Organizaciones de derechos humanos y colectivos sociales han denunciado la falta de transparencia y la priorización de intereses políticos sobre el bienestar de los ciudadanos.
La Asociación de la Prensa de Madrid (APM) ha solicitado una auditoría independiente para esclarecer los criterios utilizados en la asignación de estos fondos.
«Es fundamental que los recursos públicos se utilicen de manera equitativa y transparente, garantizando que todos los medios tengan igualdad de oportunidades para acceder a la publicidad institucional», declaró María Pérez, portavoz de la APM.
Según el informe, en comparación con otras comunidades autónomas, Madrid ha gastado un 35% más en publicidad institucional dirigida a medios específicos.
Este dato pone en evidencia la necesidad de establecer criterios claros y objetivos para la distribución de estos fondos, evitando cualquier tipo de favoritismo o manipulación política.
Es necesario que se implementen mecanismos de control más estrictos y se promueva una distribución justa de los recursos públicos, asegurando que todos los medios, independientemente de su línea editorial, tengan acceso a la publicidad institucional.
La revelación de que Ayuso ha destinado 1,7 millones de euros en publicidad institucional a medios afines en los últimos cuatro años plantea serias cuestiones sobre la transparencia y el uso de los fondos públicos.